Saliendo de la rutina...
Domingo por la mañana, levantarme con ganas de ir a la casa de Dios. Saliendo de la iglesia recibo una llamada, es mi mejor amigo del colegio:
- Yrma, ¿vamos al corso?
- No, no pasa nada. No me gusta el corso. La montonera de gente. Los choros rondando. No, no creo.
- ¡Anímate!
- Bueno pues. Llama a Carlitos, yo llamo a Paty y me llamas para ver cómo acordamos.
Quedamos para las 3:30pm. Mi mejor amigo llega a las 4:00pm, para variar.
Vimos el final del corso. Qué hacer luego. Vamos al Mall. Vamos al Real Plaza. Al Play Land Park. A casa de la madre (una amiga que nos hizo tíos, es decir, ya tiene su hija pues).
Resultamos caminando al Real Plaza. Luego Pizza hut.
- Señorita, denos un hut pack, una chorizo chesse (o algo así era la oferta que venía con gaseosa incluida).
La señorita nos trajo algo que, al parecer era nuestra pizza (una masa delgada con un poquito de tomate picado)
- ¿Les sirvo?
- ¡No! - digo yo.
- Sí - dice Paty.
La señorita se retira, después de habernos servido.
- ¿Puedo decir algo? - dije algo estupefacta.
- No, ¡no lo digas! - dijo Carlitos.
- ¡Me siento estafada!
- Ok. Lo dijiste.
- Eso iba a decir yo - dice mi mejor amigo.
- Hemos pagado 40 soles por esto ¿?. No puedo creerlo - les dije sin más ni menos.
Comimos resignados, convencidos de que no entendíamos, pero que lo aceptábamos.
Pasaron cinco minutos, y llega la chica:
- Aquí está su pizza.
Lo que traía sí era una verdadera pizza, con champignones, y chorizo y queso: verdadera grasa comestible.
Mi primer pensamiento: "ok, se equivocó y se va a llevar esta pizza que nos ha traído". "Pero cómo si ya le hemos comenzado".
Mi mejor amigo pensaba "¡Por fin!, ésa si es una pizza"
¿Qué pasó? Lo primero que nos había traído venía incluido con la oferta, era una bruschetta. Plop. No, no era la pizza.
Comimos después de habernos reído. Y todos felices y contentos. Los cuatro.
Había unos tipos que estaban tocando rock en el segundo piso. Subamos las escaleras eléctricas (que para ser eléctricas son muy lentas).
Nos ubicamos listos para escuchar. Sentaditos como niños buenos.
- Gracias gente. Hasta la próxima - dijo el vocalista del grupo.
Como niños buenos nos regresamos al primer piso, yo por las escaleras nada rápidas, mientras mis amigos se fueron por las escaleras más rápidas, donde usas tus pies para acelerar.
¡Muchachos, se pasaron! Me regalaron un domingo diferente. ¡Gracias por esa amistad que perdura!
Paty: ¡lo siento! Sé que querías escuchar a esos patas cantar.
Jaime: la de la pizza es inolvidable.
Carlitos: seguro hubieras querido grabar mi cara de estafada.
Dios: gracias por estos amigos que me has regalado.
Pucha! Falta de calle pé. Así es cuando uno no sale ni a la esquina...jejejej. de seguro se gastaron todo el pasaje del cole o la universidad.... Pobechitos....
ResponderEliminarBueno pé! Por lo menos disfrutaron un buen domingo... De seguro al momento de comer lo hicieron en nombre de los millones de niños desnutridos del mundo...paqe por lo menos llegue los deseos...jiji.
Pd. Una bomita..jejej
Jajaja se ve q somos de comer en la esquina un atincucho o una hamburguesa de dos quina XD q buen "susto" se paso , aunq creo que el/la mas asustado/a fue quien pago en ese momento.
ResponderEliminarPa la proxima en Junin
Ah se me olvidaba, un saludo para la señorita mas buena gente del mundo q nos espero a pesar q nos fuimos.
Atte
Un Hipertenso
La señorita más buena del mundo que nos esperó fue la señorita mesera que ni cuenta se dio que nos fuimos de la mesa, después de haber visto los precios exorbitantes, y revisar nuestros bolsillos casi vacíos, jajajjajja. Pero volvimos, qué conste!
ResponderEliminarVaya, lo mismo me paso a mi jaja.Sorprendido, con pena y sobre todo con ese sentimiento de ser estafado comia la bruschetta, y al rato cuando me resignaba llego la pizza. supingo que pasa mas seguido de lo que pense. espero que te sirva de consuelo, no eres la unica que creyo que eso era la pizza.. jej.
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